MADRID,
El Obispo de Cádiz y Ceuta, Mons. Antonio Ceballos Atienza, llamó a los españoles a ser agradecidos con la sabiduría que los abuelos prestan a la sociedad "y que no se aprende en los laboratorios sino en la vida".
En una carta pastoral, el Prelado recordó que este 26 de julio se celebra la fiesta de San Joaquín y Santa Ana, quiénes según la tradición son los abuelos de Jesús. Afirmó que "este es un día propicio para mostrar a nuestros abuelos el cariño que le tenemos, y desde lo más profundo de nuestro corazón darles las gracias por su sencillo, heroico y valioso testimonio".
Mons. Ceballos indicó que en la actualidad la sociedad "postula y exige que se restablezca un reconocimiento público, universal y particular por los abuelos", pues en ellos "encontramos una carga de bondad y experiencia de vivencia del sacrificio que son inestimables".
"Ellos aprenden pronto que la sabiduría de la vida consiste en aceptar lo que uno es, hacer lo que uno es capaz de hacer en esta edad, y encontrar en ello la felicidad. Así viven ese momento de su vida en plenitud y viven con alegría y optimismo. Un modelo acabado de anciano, alegre, optimista, comprensivo y emprendedor fue el Beato Papa Juan XXIII", destacó.
Por ello, llamó a los españoles a expresar un acto de amor donde "los mismos abuelos puedan volver a sentirse verdaderos protagonistas".
"Gracias por esa sabiduría acumulada con el paso de los años y que no se aprende en los laboratorios sino en la vida. Sabiduría que nos ayuda a relativizar las cosas superficiales, y a la larga estériles, y a ir a lo esencial", expresó.