LA HABANA,
Yenysel Díaz Sánchez, hija del prisionero de conciencia Antonio Ramón Díaz Sánchez, pidió que se respeten los derechos humanos de su padre, quien pese a su precario estado de salud, es víctima de maltratos físicos y psicológicos por parte de las autoridades cubanas.
En una carta enviada a nuestra redacción, Yenysel señaló que su padre, encarcelado durante la Primavera Negra de 2003, es uno de los primeros coordinadores del Movimiento Cristiano Liberación y colaboró en la entrega de las primeras firmas del Proyecto Varela. "Como recompensa el gobierno lo condenó a 20 años confinándolo en una prisión a más de 700 kilómetros de su hogar", señaló.
En su carta, Yenysel informó que ocho meses atrás su padre fue enviado al Hospital Militar por una crisis de colitis ulcerativa idiopática adquirida en prisión. Durante esos meses Seguridad del Estado propuso a la familia trasladarlo a una cárcel más cercana si se ponía "el uniforme de preso común, es decir de criminal"; sin embargo, como "no aceptó este chantaje", fue enviado a una prisión a unos 500 kilómetros de su hogar, en Canaleta, Ciego de Ávila.
El texto denuncia también las condiciones precarias en que se encuentra Díaz Sánchez, "en una celda que tiene dimensiones de una jaula, con un hueco para las necesidades y una losa que sirve de cama, en medio de la oscuridad y humedad permanentes y sin ninguna comunicación al exterior", con "una alimentación de campo de concentración sin importar la dieta prescripta por los médicos".
Yenysel señaló que su padre "sólo está defendiendo su dignidad en condiciones de total desventaja física pero con toda la razón moral".
Por ello, pidió "a todas las personas de Buena voluntad que no dejen morir a nuestro padre en las mazmorras de las cárceles cubanas por personas que no son capaces de respetar los derechos de un hombre que ha dedicado su vida a defender los derechos humanos de todo un pueblo".