MADRID,
El Arzobispo de Madrid y Presidente de la Conferencia Episcopal Española, Cardenal Antonio María Rouco Varela, presidió este fin de semana la Eucaristía en el Cerro de los Ángeles, en Getafe, en la que se renovó la Consagración de España al Sagrado Corazón de Jesús, que se hiciera hace 90 años.
En su homilía ante unos 20 mil fieles presentes, precisa el diario ABC, el Purpurado advirtió que "el camino de la descristianización no conduce a ningún futuro de salvación y de verdadera felicidad para el hombre". Por esa razón, añadió, "renovamos hoy aquella solemnísima consagración" que "hicieran nuestros antepasados". Y "lo hacemos pidiéndole para todas las familias de nuestra patria y para todos los españoles que nos conceda por medio de su Espíritu robustecernos en lo profundo de nuestro ser, que Cristo habite por la fe en nuestros corazones, que el amor sea nuestra raíz y nuestro cimiento".
El Cardenal Rouco recordó luego que hace 90 años, en el mismo Cerro de los Ángeles, "se consagraba España al Sagrado Corazón de Jesús ante la estatua que había sido levantada por la piedad cristiana del pueblo español en este lugar elegido sabiamente para expresar una plegaria ardiente e incesante: que el Sagrado Corazón de Jesús reinase en España por la gracia de su amor infinitamente misericordioso, elección, fruto de una luminosa toma de conciencia histórica y llena de un profundo significado espiritual para el presente y el futuro de España".
Seguidamente el Purpurado subrayó que aunque los tiempos han cambiado desde aquel 30 de mayor de 1919 cuando Alfonso XIII realizó la primara consagración, también hoy España necesita "los bienes de la reconciliación, de la solidaridad, de la justicia, de la concordia y de la paz".
En su homilía, precisa ABC, el Cardenal se refirió también al Año Sacerdotal y subrayó que los presbíteros "son los instrumentos imprescindibles de la gracia y del amor salvador de Cristo". Por ello, "la renovada consagración de España al Santísimo Corazón no cuajará en frutos abundantes de vida y testimonio del amor cristiano sin sacerdotes santos".
"¡España, la España de hoy, necesita muchos y santos sacerdotes según el corazón de Cristo!", concluyó.