SANTIAGO,
El Arzobispo de Santiago, Cardenal Francisco Javier Errázuriz, llamó a los jóvenes que se sientan llamados a la vida sacerdotal y consagrada a responder a la invitación de Cristo, quien les llama "por su propio nombre" para confiarles la misión que hará sus vidas más plenas y fecundas en bien de los demás.
"Lo más importante para cada uno de ustedes es fundamentar la vida con la confianza más plena en la vocación que Dios le ha dado, es decir, en la seguridad de que él le llama por su propio nombre y quiere confiarle la misión que hará su vida más plena, más feliz y más fecunda en bien de los demás. Nadie tiene un proyecto para su propia vida más hermoso que el proyecto del Señor", expresó el Purpurado en una extensa Carta Pastoral sobre la Vocación Sacerdotal.
El Cardenal también pidió a los jóvenes impulsar en sus comunidades "un clima propicio a la vocación, favoreciendo la conversación sobre este tema y la búsqueda del camino vocacional que Dios le propone a cada uno".
También se dirigió a quienes van al matrimonio. "Si su camino fuera el matrimonio, después de contraer la alianza matrimonial, también pueden pedirle a Dios que uno de sus hijos sea llamado por él al sacerdocio o a la vida consagrada", expresó.
"Pero si intuyen que el Señor podría llamarles al sacerdocio o a la vida consagrada, recurran al sacerdote que les inspire más confianza. Él podrá ayudarles a encontrarse con Cristo más profundamente, y a discernir con sinceridad el propio camino", recomendó.
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