APARECIDA,
Más de 30 mil personas participaron el pasado domingo de la peregrinación nacional por la familia organizada por la Conferencia de Obispos Católicos de Brasil (CNBB) que tuvo como punto culminante el Santuario de Nuestra Señora de Aparecida, la Patrona del país.
Esta peregrinación que tuvo como lema "Familia discípula y misionera al servicio de la vida", explica el Presidente de la Comisión Episcopal para la Pastoral de la Vida y la Familia, Mons. Orlando Brandes, tuvo como principal objetivo acrecentar la conciencia sobre el valor y la centralidad de la familia frente a la crisis actual.
En la homilía de la Misa con la que concluyó la peregrinación, el Arzobispo de Mariana y Presidente de la CNBB, Mons. Lyrio Rocha, señaló que "venimos a pedirle a la Madre de Dios y nuestra Madre que extienda su manto sobre las familias brasileñas, siempre más vulnerables a causa de las grandes dificultades que hace falta afrontar en nuestros días".
La familia, resaltó, "es el lugar en el que se aprendan las virtudes, los valores, los criterios y actitudes que son necesarios para una auténtica convivencia social". Esta importante institución solo puede formarse a partir del matrimonio formado por un hombre y una mujer, "por lo que no debe ser confundida con otro tipo de convivencia", precisó luego.
Para fortalecer a la familia, explicó, "es necesario que se promueva una pastoral de la familia intensa y vigorosa" por lo que hace falta "multiplicar las asociaciones familiares capaces de dialogar con las distintas instancias del poder público".
Finalmente indicó que es necesario también que "el poder público se esfuerce decididamente en promover medidas que respeten, valoren y protejan a las familias".