VATICANO,
En la homilía de la Misa que presidió esta mañana en su visita apostólica a Cassino y Montecassino en la Solemnidad de la Ascensión del Señor, el Papa Benedicto XVI alentó a los fieles a atesorar la herencia de la vida monástica instaurada por San Benito y exhortó a laborar en la construcción de una nueva humanidad con oración, trabajo y cultura.
En la Plaza Miranda de Cassino, que desde hoy lleva el nombre de Benedicto XVI por decisión del Consejo Comunal, el Santo Padre señaló ante los miles de fieles presentes que “el carácter histórico del misterio de la resurrección y de la ascensión de Cristo nos ayuda a reconocer y comprender la condición trascendente y escatológica de la Iglesia, que no ha nacido ni vive para suplir la ausencia de su Señor ‘desaparecido’, sino que sobre todo encuentra su razón de ser y de su misión en la invisible presencia de Jesús operante con la potencia de su Espíritu”.
“En otros términos, podemos decir que la Iglesia no cumple la función de preparar el retorno de un Jesús ‘ausente’, sino que al contrario, vive y opera para proclamar la ‘presencia gloriosa’ de manera histórica y existencial”, añadió.
Al hablar luego del legado de uno de los patrones de Europa, San Benito de Nursia, que fundara la orden benedictina y el primer monasterio de la misma en Montecassino en el siglo VI, el Santo Padre explicó que “la espiritualidad benedictina, bien conocida por ustedes, propone un programa evangélico sintetizado en el lema: ora et labora et lege, la oración, el trabajo y la cultura. Antes que nada la oración, que es la más bella herencia dejada por San Benito a los monjes, pero también a vuestra Iglesia particular”.
Tras recordar que “en la escuela de San Benito los monjes siempre han cultivado un amor especial por la Palabra de Dios en la lectio divina, que se ha convertido hoy en un patrimonio común de muchos”, el Papa resaltó que “otro punto cardinal de la espiritualidad benedictina es el trabajo”.
“Humanizar el mundo del trabajo es típico del alma del monacato, y éste es también e esfuerzo de vuestra comunidad que busca estar al frente de numerosos trabajadores de la gran industria presente en Cassino y de las empresas relacionadas a ella. Sé cuán crítica es la situación de muchos trabajadores. Expreso mi solidaridad a cuantos viven en una precariedad preocupante”.