CARACAS,
Los obispos venezolanos reunidos en Asamblea Plenaria difundieron una exhortación en la que piden que se recupere el Estado de Derecho en el país con respeto a la voluntad popular y que el gobierno no pretenda imponer a la fuerza su proyecto de país.
Tras reconocer "los esfuerzos reales para lograr la inclusión de los sectores más excluidos", lo obispos lamentan que se hayan "multiplicado las actuaciones que generan o refuerzan la exclusión de otros sectores, al ir reduciendo o negando espacios de participación y ciudadanía".
"No es posible lograr entendimiento ni tener paz en una nación en la que un gobierno pretenda imponer a la fuerza su proyecto de país a toda la población, más aún cuando tal pretensión ha sido rechazada electoralmente, como sucedió en Venezuela en el Referéndum del 2 de diciembre de 2007", indicaron.
Asimismo, manifestaron su preocupación porque "diversos actores de la sociedad desconozcan la voluntad popular, expresada en las elecciones regionales de noviembre de 2008, e impidan o coarten la acción de autoridades elegidas legítima y democráticamente por el pueblo. De esa manera se entorpece la existencia de una sociedad plural y se generan dudas sobre la validez y eficacia del voto en los comicios electorales".
Los prelados consideraron "necesario restaurar o fortalecer el Estado de Derecho. Como Pastores nos sentimos comprometidos a defender todos los derechos humanos, a contribuir decididamente a la erradicación de la pobreza en la sociedad venezolana, y a promover la defensa de la vida y cuanto eleve el valor y la dignidad de la persona".
"Es indispensable que en el centro de intereses y discusiones se ponga la vida cotidiana de la gente, la solución de sus problemas e inquietudes, antes y por encima del discurso meramente ideológico, que pospone y aleja las soluciones. El diálogo y la superación de la desconfianza entre las varias corrientes de pensamiento favorecerán la construcción de políticas adecuadas", señalaron.