VATICANO,
El Papa Benedicto XVI llegó a Roma luego de su histórico viaje a África y en el vuelo de retorno compartió con la prensa su asombro por el profundo sentido de lo sagrado de los africanos.
El Santo Padre se declaró impresionado por "la cordialidad casi exuberante, la alegría de una África en fiesta. Me parece que han visto en el Papa, por decirlo así, la personificación del hecho de que todos somos hijos y familia de Dios. Esta familia existe y nosotros, con nuestras limitaciones, formamos parte de ella y Dios está con nosotros”.
“También me ha impresionado mucho el espíritu de recogimiento en las liturgias, el fuerte sentido de lo sagrado: en las liturgias no hay auto-presentación de los grupos, ni auto-animación, sino la presencia de lo sagrado, del mismo Dios; los movimientos también eran movimientos de respeto y de conciencia de la presencia divina", indicó.
El Pontífice manifestó su pesar por la muerte de dos jóvenes durante “la avalancha de público en el ingreso del Estadio dos Coqueiros, el sábado. Recé y rezo por ellas. Todos nosotros rezamos y esperamos que en el futuro las cosas se organicen para que un hecho así no vuelva a suceder”.
También señaló que conserva un recuerdo especial “el Centro Cardenal Léger: me ha llegado al corazón ver el mundo de los múltiples sufrimientos -todo el dolor, la tristeza, la pobreza de la existencia humana-, pero también ver cómo el Estado y la Iglesia colaboran para ayudar a los que sufren. Se ve que las personas cuando ayudan a quienes sufren se vuelven más personas y el mundo se vuelve más humano".
Finalmente, recordó la distribución del "Instrumentum laboris" o documento de trabajo para el próximo Sínodo dedicado a África.