BARCELONA,
El Arzobispo de Barcelona, Cardenal Lluís Martínez Sistach, afirmó que a causa de la crisis económica, Cristo le pide a sus obispos realizar su servicio de amor "sobre todo hacia nuestros hermanos y hermanas que atraviesan por momentos de graves necesidades".
Durante la Misa de ordenación episcopal del Obispo Auxiliar de Barcelona, Mons. Sebastià Taltavull Anglada, el Purpurado recordó que el amor de Cristo por los hombres tiene para los pastores "unos contenidos específicos".
"Se trata de la caridad pastoral que se vive y se practica imitando a Jesús, el Buen Pastor, que vino no a ser servido sino a servir y a dar su vida por las ovejas. Se trata de perseverar en el amor del Señor, y esto pide cumplir sus mandamientos y hacer la voluntad del Padre", afirmó.
Por ello, señaló que "hoy especialmente, a causa de la crisis económica, este servicio y amor nos piden que lo realicemos sobre todo hacia nuestros hermanos y hermanas que atraviesan por momentos de graves necesidades".
"En medio de la cultura presente en nuestra sociedad occidental, poco abierta a la trascendencia, materialista y en la que la cruz de Cristo –como en tiempos del Apóstol Pablo– es motivo de escándalo o de necedad, es necesario ofrecer el testimonio claro y convincente del amor característico de los discípulos de Cristo", afirmó.
Asimismo, le recordó al nuevo Obispo Auxiliar, que Cristo "ha dicho que estará con nosotros día tras día hasta la consumación del mundo" y que para llevar a cabo la misión encomendada "es necesaria la fortaleza propia de una persona auténticamente madura".