CARACAS,
El Consejo Nacional de Laicos de Venezuela (CNL) emitió un comunicado en el que rechazan la violencia antirreligiosa en el país, concretamente los ataques a la Nunciatura Apostólica y la Sinagoga principal de Caracas; al tiempo que convocan a una jornada de oración por la paz para este miércoles 11 de febrero.
"Como católicos venezolanos, rechazamos el desprecio a la vida humana, 'pareciera que la vida no vale nada' , el asesinato, el secuestro y el sicariato. Rechazamos los discursos violentos, de cualquier parte provengan, llenos de palabras de odio que conducen a la división entre los venezolanos", señalan.
Seguidamente expresan su enérgico rechaza a "los reiterados ataques contra la Nunciatura Apostólica, que no sólo son una agresión contra una Embajada, sino, ante todo, un agravio directo al Santo Padre y toda la catolicidad. De igual manera, rechazamos las constantes ofensas y amenazas contra la Conferencia Episcopal y otros representantes de la Iglesia Católica".
Rechazan, además, la "profanación de la Sinagoga Tiferet de Caracas y todos los ataques recientes a la comunidad judía, actitudes antisemitas totalmente desconocidas hasta ahora en Venezuela".
Tras precisar que "la religión es parte esencial de la cultura de los pueblos", el CNL precisa que "el Estado tiene el deber de respetar la libertad religiosa, que es un derecho fundamental reconocido no sólo en nuestra Constitución sino en los instrumentos internacionales sobre derechos humanos. Nuestro Libertador fue un ejemplo de ese respeto a las convicciones y tradiciones religiosas de nuestro Pueblo. Los actos violentos no corresponden al sentir del venezolano, por naturaleza pacífico, tolerante y acogedor".
"Anhelamos construir un futuro de convivencia pacífica basado en los valores humanos, cívicos y religiosos que constituyen el núcleo más profundo de nuestra nacionalidad. Solamente con la conversión del corazón, la reconciliación y el perdón, podremos alcanzar lo que tanto deseamos: una sociedad justa y fraterna", prosiguen.