MADRID,
El Presidente Emérito del Pontificio Consejo para la Cultura, Cardenal Paul Poupard, recordó que en la universidad católica debe primar "la formación integral de la persona" y que un centro de estudios superiores no puede convertirse "en una mera fábrica de titulados".
Durante las Conversaciones Universitarias "Universidad Católica: ¿nostalgia, mimetismo o nuevo humanismo?", organizadas por el Instituto John Henry Newman de la Universidad Francisco de Vitoria, el Purpurado explicó que "la universidad no puede plegarse a las exigencias del mercado y convertirse en una mera fábrica de titulados", pues su misión "es el servicio apasionado de la verdad".
El Cardenal también recordó que en la universidad católica debe primar "la formación integral de la persona, que integre los distintos saberes", porque solo buscando el crecimiento del ser humano se evitará "un mundo dominado por expertos sin alma".
"La misión de la universidad católica no está completa si no aspira a la evangelización", afirmó el Cardenal Emérito, quien llamó a los profesores universitarios a "ser maestros de sus alumnos y no sólo docentes".
"El porvenir de la humanidad está en manos de quienes sepan dar a las generaciones venideras razones para vivir y razones para esperar", aseguró.
Por su parte el Arzobispo Emérito de Pamplona y Tudela, Mons. Fernando Sebastián, disertó sobre "la Universidad Católica en un mundo laicista", en la que se refirió al Proceso de Bolonia que "busca un modelo de Universidad con unos rasgos comunes que sean válidos para toda Europa, cuando no sabemos muy bien qué es lo que Europa quiere ser".