VATICANO,
Al recibir esta mañana a los prelados de la Conferencia de Obispos Católicos de la Federación Rusa en visita "ad limina" en el Vaticano, el Papa Benedicto XVI los alentó a seguir anunciando el Evangelio con fidelidad; continuar la labor de fomentar un auténtico espíritu de fe entre los fieles y les expresó su "profunda gratitud por el bien" que realizan.
Benedicto XVI alabó el "esfuerzo de inculturación de la fe" de los obispos y manifestó su aprecio por "el empeño con que cuidáis la participación litúrgico-sacramental, la catequesis, la formación sacerdotal y la preparación de un laicado maduro y responsable, que sea fermento evangélico en las familias y en la sociedad civil".
Luego de exhortar a seguir trabajando por anunciar a Cristo incluso "cuando los resultados pastorales no se corresponden con los esfuerzos realizados", el Papa exhortó a alimentar "sobre todo en vosotros y en vuestros colaboradores un auténtico espíritu de fe" sabiendo que Jesucristo "hará fecundo, con la gracia de su Espíritu, vuestro ministerio".
"Seguid promoviendo y cuidando, con constante empeño y atención, las vocaciones sacerdotales y religiosas; sostened a los presbíteros en la formación permanente doctrinal y espiritual. Cuidad también la formación de las personas consagradas y el crecimiento espiritual de los fieles laicos, para que sientan su vida como una respuesta a la llamada universal a la santidad, que debe manifestarse en un testimonio evangélico coherente en todas las circunstancias cotidianas".
El Santo Padre también resaltó que "es necesario un renovado compromiso en el diálogo con nuestros hermanos y hermanas ortodoxos", que a pesar de los progresos "sigue conociendo algunas dificultades". Por ello, manifestó sus mejores deseos al nuevo patriarca de Moscú y de todas las Rusias, el metropolita Kirill, "ante la delicada tarea que se le ha confiado".
"Es importante que los cristianos afronten unidos los grandes desafíos culturales y éticos del momento presente, concernientes a la dignidad de la persona humana y a sus derechos inalienables, la defensa de la vida en cada una de sus etapas, la tutela de la familia y otras cuestiones económicas y sociales urgentes".