MADRID,
El Obispo de Palencia, Mons. Ignacio Munilla, rechazó la nueva forma como se presenta la cultura de muerte, que bajo las palabras "tolerancia y libertad", promueve la eutanasia y hace creer "a los débiles y desahuciados de nuestra sociedad" que están sobrando y deben "quitarse de en medio".
"¿Qué pensar de una cultura que reivindica la muerte –el suicidio asistido– como un derecho? ¿Y qué sociedad estamos construyendo, en la que se llega a considerar la vida como un ‘infierno’, y a la muerte como una ‘liberación’?", cuestionó el Prelado en una columna publicada en el diario El Norte de Castilla.
Mons. Palencia recordó que a lo largo de la historia el cristianismo ha ido transformando la sociedad, erradicando "la cultura cruel e inmisericorde del Imperio Romano y del mundo bárbaro" y enseñando que la pobreza y la debilidad no son un signo de maldición, sino "un reto para nuestra generosidad".
"En el caso concreto de la atención a los enfermos, con la llegada del cristianismo comenzó la asistencia a los ‘incurables’, aquellos que hasta entonces, según la práctica habitual, eran abandonados, e incluso expulsados fuera de los muros de la ciudad", afirmó.
Sin embargo, indicó que la cultura de muerte también ha tenido representantes, como el filósofo Friedrich Nietzsche, quien despreciaba el cristianismo por difundir "los ideales de la compasión, la piedad, la humildad". Nietzsche, dijo el Obispo, impulsó un pensamiento que puso "las bases para el posterior surgimiento del nazismo, del comunismo y de otras visiones anticristianas de la existencia".
Tras la dramática experiencia vivida con estas corrientes, indicó, se pensó que Occidente volvería a "progresar en humanismo". Sin embargo, "nos encontramos con numerosos signos de alarma" de la cultura de la muerte.