ROMA,
"Recuperar el gusto de la experiencia personal por la misericordia de Dios es la prioridad que deben tener presentes los seminaristas y sacerdotes si quieren hacer redescubrir al Pueblo de Dios el tesoro de la gracia y el contenido del Sacramento de la Reconciliación" es una de las conclusiones del Simposio recientemente finalizado en Roma sobre la Penitenciaría Apostólica.
Según L'Osservatore Romano, el evento realizado los días 13 y 14 de enero en el Palacio de la Cancillería en Roma sobre la Penitenciaría Apostólica ha sido, en palabras del Penitenciario Mayor, Cardenal Francis Stafford, una ocasión "para ofrecer a los hombres y mujeres de hoy, inmersos en la cultura de la postmodernidad, la oportunidad de reflexionar profundamente sobre su vida interior y pedirle a Dios el perdón por el 'abuso de poder' que está en sus manos".
"El objetivo que tenemos –dijo también el Purpurado– es el de profundizar en el significado pastoral de nuestro Tribunal y por qué la Iglesia, en su sabiduría, ha creado este tribunal de Misericordia. Mi esperanza es que la respuesta haya quedado clara en estos dos días de encuentro y conversación".
Tras destacar las esperanzas que tiene el Cardenal sobre la recuperación del sacramento de la Reconciliación, LOR cita a Manlio Sodi, de la Pontificia Universidad Salesiana, quien dirigió la mesa redonda con la que concluyó el Simposio, quien aclara el tema de las confesiones colectivas y las liturgias penitenciales "de grupo", difundidas especialmente en Norteamérica, "ritos que desnaturalizan las bases mismas de un gesto personal como es el de la Confesión".
"Es una usanza –precisa Sodi– que conlleva enormes problemas. Si en vez de ello se conociera y se observase el ritual de la Penitencia se evitaría la desorientación de los fieles".
LOR añade luego que es de resaltar "cómo ya la antigua fórmula de la Confesión subrayaba la dimensión –que todavía hoy se pone en evidencia– de la liberación que la misericordia divina ofrece gratuitamente al fiel que quiere reconciliarse con Dios".