VATICANO,
El Prefecto de la Congregación para la Educación Católica, Cardenal Zenon Grocholewski, advirtió cómo muchos sacerdotes dedicados a la enseñanza se olvidan o dejan de lado su necesaria actividad pastoral ordinaria, en la que la Palabra de Dios debe ser el centro.
En su intervención en el Sínodo de los Obispos, el Purpurado señaló que si bien "hoy se multiplican los institutos de estudio sobre todo para los laicos y personas consagradas, al mismo tiempo parece aumentar la ignorancia religiosa".
La reciente investigación, continuó, "encargada por la Federación Bíblica Católica en diez países europeos ha demostrado una ignorancia en los conocimientos elementales de la Biblia como las siguientes: '¿Son los evangelios parte de la Biblia?', '¿Jesús escribió la Biblia?', '¿Quién entre Moisés y Pablo era un personaje del Antiguo Testamento?', etc.".
En su opinión, es necesario ante esta situación tener en cuenta que "hacemos mucho, pero tal vez no distribuimos razonablemente las fuerzas en las distintas tareas y grados de enseñanza. El aumento de los institutos va con frecuencia escapando de una enseñanza más difundida en la pastoral ordinaria. Disminuye el número de sacerdotes y al contrario aumenta el número de presbíteros que se sienten llamados a ser profesores, dejando la cura pastoral ordinaria".
Para poder anunciar la Palabra de Dios, precisa el Cardenal Grocholewski, es necesario esforzarse y ponerla a disposición de los fieles atribuyéndole "la importancia del caso a la verdad fundamental de la fe, centrada en la Palabra de Dios, porque ella determina nuestra vida cristiana, nuestra relación con el Señor, nuestra alegría cristiana".
El Purpurado explicó además que para poder dar a conocer adecuadamente la Palabra de Dios se necesita "interpretarla y enseñarla, se necesita la oración, la escucha, la fe, la docilidad al Espíritu Santo, para conocer el verdadero sentido teológico-espiritual de la Palabra de Dios, el primado del testimonio del anuncio de la Palabra de Dios".