SANTIAGO,
El Secretario General de la Conferencia Episcopal Chilena (CECH), Mons. Cristián Contreras Villarroel, afirmó durante el Día de Oración por los Pueblos Indígenas, que el desafío de estos pueblos es ser constructores de la paz en el país, inspirados en el mensaje de Jesucristo.
Al tomar como ejemplo la vida del Beato Ceferino Namuncurá, Mons. Contreras recordó que el mensaje que conquistó a este indio mapuche “era de paz para su pueblo. Esto no implicaba un sometimiento a las crueldades que muchas veces padecían, pero sí una búsqueda de soluciones al estilo de Jesús, que nos amó y se entregó por nosotros por los caminos de la justicia y de la paz”.
En ese sentido, alentó a los miembros de los pueblos originarios para que “ese ardor por difundir el Evangelio”, les inspire “para enfrentar los desafíos y las luchas” que dan “por su reconocimiento, el respeto de su identidad, la preservación de sus culturas y la promoción de sus hombres y mujeres”.
El Secretario General de la CECH afirmó que es imprescindible “establecer un diálogo inspirado en la verdad, el respeto y la dignidad de las personas, para encontrar soluciones definitivas a las justas demandas” de estos pueblos, “teniendo siempre presente que la violencia como camino de lucha jamás permitirá alcanzar la paz que tanto queremos para todos”.
“Desde la Iglesia hemos señalado que estas situaciones ‘se deben al desconocimiento, prejuicios y discriminación hacia los indígenas; de políticas que se han demostrado inadecuadas, y de una instrumentalización por parte de personas ajenas a esta realidad que obstruyen los acuerdos con agitación y violencia’”, señaló.
Por ello, tras invitar a pedir a Dios para que se superen los prejuicios, Mons. Contreras llamó a acoger “el desafío urgente de trabajar por la paz”, el cual “es un bien preciado pero precario que debemos cuidar, educar y promover todos en nuestro continente”.