ROMA,
Caritas Georgia y Caritas Rusia están trabajando para asistir a las miles de víctimas civiles que ha dejado como saldo el conflicto entre estos dos países en el que se registró recientemente un intenso bombardeo que afectó a Georgia.
Según informa L'Osservatore Romano (LOR), el Administrador Apostólico del Cáucaso de los Latinos, Mons. Giuseppe Pasotto, indicó que "hay mucho temor y desilusión entre los georgianos porque piensan que de un momento a otro pueden comenzar nuevamente los bombardeos".
"Desde el miércoles por la noche, luego de las intervenciones diplomáticas y el anuncio televisivo de que las tropas rusas dejaban Georgia, la situación parece haber retornado a la normalidad aunque llegar a la ciudad de Gori es imposible. Pensé en enviar un párroco para verificar los daños ocurridos en la población y ver el estado de salud de las familias, pero la policía georgiana ha impedido el acceso por razones de seguridad", añadió.
Ante la crisis existente, explicó el Prelado, "Caritas Georgia ha iniciado la ayuda a las familias en dificultades. Afortunadamente tenía bienes de primera necesidad y alimentos que ya comenzó a distribuir en los distintos campamentos en donde son acogidos quienes han perdido sus hogares" y explicó que esta labor se está realizando con "la colaboración del patriarcado".
LOR informa también que Caritas Rusia ya ha visitado los campos para verificar juntos con los responsables de la Iglesia Ortodoxa como activar la ayuda de la parte católica destinada a los prófugos. Según los datos que posee, hasta el momento son 34 mil los refugiados en el norte de Osetia y cerca de 40 mil los prófugos de Georgia.
"Todos los años en nuestra Catedral de Santa María Asunta –prosigue el Obispo– se organizan una serie de eventos, pero mañana no haremos ninguno, excepto las misas para recordar a las víctimas de la guerra. Estaremos aquí todos juntos para rezar e invocar al Espíritu Santo. Los georgianos son muy creyentes y sobre todo muy altruistas".