LA PAZ,
El Arzobispo de Cochabamba, Mons. Tito Solari, señaló que este año el desafío de los boliviano es ser coherentes "con la fe y ser sembradores de paz y amor".
Este año el desafío "es ser coherente con nuestra fe y ser sembradores de paz y amor en un contexto que es verdaderamente difícil, pero Urkupiña nos espera para eso, para que seamos hermanos y fieles, que renuevan nuestra sociedad y la hacen cristiana", expresó el Arzobispo con ocasión del inicio de la Fiesta de la Virgen de Urkupiña.
Al presentar el material que acompañará a los peregrinos, el Prelado destacó que este año las palabras importantes son integración, paz, unidad y reconciliación. "Pero, también nos damos cuenta que estas palabras tan profundas, tan preciosas, caen en un clima muy difícil", indicó.
En ese sentido, señaló que el desafío es ser coherentes con nuestra fe y el comportamiento que debe tener todo cristiano, "porque nos gritamos unos contra otros, ofendiéndonos y después estamos delante de la Virgen con las manos unidas, con mucha esperanza para que nos escuche".
Por su parte, el P. Víctor Benavente, de la parroquia de San Ildefonso, donde se encuentra la imagen mariana, llamó a los fieles a hacer de esta celebración verdaderamente la fiesta de la integración nacional. "La celebración debe convertirse en un hito, haciendo realidad la denominación de ‘fiesta de la integración nacional’", expresó.
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