QUÉBEC,
Al concluir su Asamblea anual realizada en la ciudad canadiense de Québec, los delegados mundiales de los Caballeros de Colón, la organización laical católica más grande del mundo, publicaron una resolución final mediante la cual se comprometen a defender el derecho a la vida y la familia de manera más enérgica y proactiva.
El documento final de los Caballeros de Colón llama a "la protección legal y constitucional para una definición del matrimonio como la unión de un hombre y una mujer y la exclusión de cualquier otra forma".
También subrayaron su oposición a "cualquier acción o política gubernamental que promueva el aborto, la investigación con células estaminales embrionarias, la clonación humana, la eutanasia, el suicidio asistido y otras ofensas en contra de la vida".
Los delegados llamaron a los católicos "que son funcionarios públicos que sean fieles a la fe que dicen profesar, actuando valiente y públicamente en defensa de la vida".
La resolución definió además que la organización reafirma "su compromiso con la construcción de una cultura de vida mediante la promoción de políticas a favor de la familia".
Durante la inauguración de la Asamblea anual de los Caballeros de Colón, el Caballero Supremo, Carl A. Anderson, desafió a los católicos a dejar de votar a favor de políticos favorables al aborto.