KÖNIGSTEIN,
El Obispo de Skopje (Macedonia), Mons. Kiro Stojanov, invitó a su diócesis a cientos de jóvenes que no pudieron asistir por motivos económicos a la Jornada Mundial de la Juventud en Sydney, para celebrar allí su fe, a la que respondieron con entusiasmo.
Entre los participantes también se encontraban numerosos ortodoxos que se han unido a las oraciones, cantos y celebraciones de los católicos; según explicó el Prelado a Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN), que ha apoyado la celebración.
Mons. Stojanov indicó también que nunca había visto "a tantos jóvenes profundamente unidos en la oración", y también ha destacado la disciplina de la que han hecho gala los participantes.
Al Obispo de Sofía (Bulgaria), Mons. Christo Proykov, le impresionó profundamente "la alegría y los rostros de felicidad" de los jóvenes en Macedonia, a los que calificó de "ejemplo para sus coetáneos".
Spase Spasov, un joven macedonio que ha participado en la organización de este acto bautizado "Pequeña Sidney", manifestó estar "entusiasmado" por la fuerte unidad que percibió entre todos los participantes, que provenían de diferentes países: había macedonios, serbios, búlgaros, ucranianos, rutenos y otros.
Es la primera vez que se organiza un acto de este tipo en Macedonia y los católicos son una minoría en el país.