CARACAS,
La Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) expresó su preocupación por el clima de inseguridad y la situación de la educación del país; a la vez que solicitó a las autoridades electorales velar por la "pulcritud" de las elecciones de noviembre, y advirtió que el lema promovido por el Gobierno que alienta a la "muerte", solo contribuye a una mayor polarización.
Al término de su 90º Asamblea Plenaria Ordinaria, los obispos venezolanos emitieron un comunicado en el que abordaron la realidad social, política y educativa del país. Indicaron que lo hacen teniendo en cuenta su "grave deber pastoral de ofrecer una orientación ética y moral para el discernimiento y la actuación de los fieles".
En ese sentido, el texto se refirió en principio al problema de la "inseguridad física, jurídica y económica", dentro del cual "la vida humana no es protegida ni respetada", sino que es víctima de "una violencia desatada y sin control" que no es enfrentada adecuadamente por las autoridades.
Los obispos lamentaron que la situación haya empeorado en los últimos siete años y que no se vislumbren soluciones a corto o mediano plazo "ante la carencia de políticas públicas efectivas de seguridad ciudadana". Por ello, llamaron a las autoridades a asumir "con decisión la urgencia de resolver la problemática de la inseguridad".
En el texto, la CEV también se refirió a las próximas elecciones regionales y municipales de noviembre. Recordó que es un proceso normal "en el desenvolvimiento de un país democrático" y que es deber del Consejo Nacional Electoral velar por su pulcritud.
En ese sentido, advirtió que "las inhabilitaciones de centenares de ciudadanos por un órgano administrativo" van contra el derecho ciudadano de elegir y de ser elegido.