ROMA,
El Oficial de la Congregación de Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica, P. Eusebio Hernández, destacó la importancia de la obediencia como respuesta "al individualismo y a la autonomía anárquica o libertaria absoluta" que muchas veces se ve en la actualidad.
Al comentar en una reciente entrevista el documento "El servicio de la autoridad y de la obediencia" publicado por el dicasterio, el sacerdote agustino señaló que "la obediencia religiosa, lejos de menoscabar la dignidad de la persona humana, la lleva, por la más amplia libertad de los hijos de Dios, a la madurez".
Asimismo, indicó que el escrito "habla de la obediencia como expresión de la libertad, porque es una obediencia filial, no de esclavo", pues "obedecer al Padre significa reconocerse hijo, como Jesús; sentirse hijos amados por el Padre".
Por eso es necesario "considerar el voto de obediencia en perspectiva contracultural, como reacción al individualismo y a la autonomía anárquica o libertaria absoluta", recordando que la "buena salud de la vida religiosa depende en gran parte de la buena salud de la obediencia y la autoridad", afirmó el P. Hernández.
Tras asegurar que "no se puede hablar de autoridad y obediencia sin hacer referencia a la comunidad", aseveró que "el documento alienta a construir comunidades fraternas, donde se escuche, se dialogue, se cree confianza, aprecio, corresponsabilidad entre los hermanos, donde todos contribuyan a las decisiones finales, donde se compagine el bien del individuo con el servicio a la obra".
El escrito, presentado recientemente en una reunión de Superiores y Superioras Generales. "Con estas disposiciones humanas y religiosas se podrán superar algunas de las situaciones que la vida religiosa debe afrontar en este providencial momento histórico que tenemos la gracia de vivir", señaló.