SAO PAULO,
Cerca de 40 mil personas se reunieron ayer 8 de junio para celebrar el Centenario la Arquidiócesis de Sao Paulo con una Eucaristía presidida por el Nuncio Apostólico en Brasil, Mons. Lorenzo Baldisseri, y concelebrada por el Arzobispo diocesano, Cardenal Odilo Pedro Scherer, en el estadio Pacaembu.
"La afluencia de fieles superó las expectativas, calculándose en casi 40 mil personas", indicó el P. Antonio Guerra, uno de los coordinadores de las celebraciones, según informó la Agencia Fides.
La Eucaristía comenzó en la lectura del mensaje del Papa Benedicto XVI por esta celebración, a cargo del Obispo Auxiliar de Sao Paulo, Mons. Pedro Luis Stringhini. Luego el Cardenal Scherer saludó a los presentes e hizo una remembranza de los obispos y arzobispos que lo antecedieron.
"Hoy queremos agradecer a Dios por la historia de nuestra arquidiócesis. Toda la comunidad arquidiocesana es invitada a testimoniar que Dios habita esta ciudad y que esto es bueno y beneficia a Sao Paulo", señaló el Purpurado.
Tras las palabras del Arzobispo, una estatua del San Pablo ingresó en procesión, y se leyó el decreto de la Congregación para el Culto Divino que designa el Apóstol San Pablo como Patrono junto a Dios de la Arquidiócesis de San Pablo, en Brasil.
Por su parte el Nuncio Apostólico recordó en la homilía el "coraje y ardor evangelizador" del Apóstol de los gentiles como fruto de su "conversión y encuentro personal con Cristo". A "partir de hoy esta arquidiócesis tiene oficialmente como patrono a San Pablo, de manera que al igual que el apóstol gigante" debe "ser un ejemplo de ardor e irradiación apostólicos para todo este continente", agregó.