MADRID,
El Obispo de Tarazona, Mons. Demetrio Fernández, defendió la presencia de los capellanes católicos en los hospitales indicando que es un derecho de los enfermos solicitar atención espiritual y no un privilegio de la Iglesia, como lo quiere hacer creer el oficialista Partido Socialista Obrero Español (PSOE).
A través de un mensaje, Mons. Fernández denunció que este intento por desplazar a los capellanes de los hospitales se debe a que se quiere "eliminar a Dios de la vida pública", pues la presencia de los sacerdotes "es presencia viva de Dios en el mundo de la salud, para atender un derecho y una necesidad de los enfermos. Suprimamos los capellanes y habremos expulsado a Dios de los hospitales".
Esta razón, indicó, va unida al deseo de quitar una referencia ética muy importante para pacientes y familiares. "El enfermo y la familia acuden a él (capellán) durante las largas horas de la enfermedad, y en él encuentran consuelo y muchas veces pauta de comportamiento".
"El capellán será un estorbo para los planes contra la vida que se están aplicando y se aplicarán. El respeto a la vida desde su concepción hasta su muerte natural es un planteamiento de sentido común, que los capellanes recuerdan continuamente", advirtió.
Asimismo, aclaró que la presencia de capellanes no responde a un intento de hacer proselitismo, pues ellos "no atienden a los que son de otras religiones". "Si el enfermo es judío o musulmán, tiene derecho a que venga un ministro de su religión y le atienda durante su enfermedad", explicó.
En ese sentido, el Prelado afirmó que esta campaña contra los capellanes ha sido "desencadenada intencionadamente", pues se ha pedido la intervención del ministerio fiscal en el tema.