NUEVA YORK,
Cuando al Papa Benedicto XVI le preguntaron qué quería hacer en su visita a Estados Unidos, el Pontífice pidió que se le garantizara una visita a la Zona Cero en Nueva York. Esta mañana cumplió su deseo y en el lugar, donde miles de personas murieron en los atentados del 11 de septiembre de 2001, pronunció una sentida plegaria.
El Papa fue recibido por 16 deudos, cuatro rescatistas y cuatro sobrevivientes, ingresó por una rampa al lugar en el que alguna vez estuvieron las Toerres Gemelas, se arrodilló y rezó en silencio.
Luego de encender un cirio, ofreció esta oración:
¡Oh Dios de amor, compasión y salvación!
¡Míranos, gente de diferentes creencias y tradiciones,
reunidos hoy en este lugar,
escenario de violencia y dolor increíbles!.
Te pedimos que por tu bondad
concedas la luz y la paz eternas
a todos los que murieron aquí-
a los que heroicamente acudieron primero,
nuestros bomberos, policías,
servicios de emergencia y las autoridades del puerto,
y a todos los hombres y mujeres inocentes
que fueron víctimas de esta tragedia
simplemente porque vinieron aquí para cumplir con su deber
el 11 de septiembre de 2001.
Te pedimos que tengas compasión
y alivies las penas de aquellos que,
por estar presentes aquí ese día,
hoy están heridos o enfermos.