MADRID,
El Arzobispo de Toledo, Cardenal Antonio Cañizares Llovera aseguró que la memoria e identidad de España "se quiera o no, son inseparables de la cristiana que la ha hecho posible".
En una ceremonia, en la que fue nombrado miembro de la Real Academia de la Historia (RAH), el Purpurado pronunció un discurso titulado: "El esplendor visigótico, momento clave en la edificación de España y para su futuro", donde señaló que en este periodo, se creó en España "una herencia, una memoria y una identidad de lo que allí nace que, se quiera o no, son inseparables de la cristiana que la ha hecho posible".
"Contemplar aquellos orígenes y contemplar a España en sus orígenes nos ayuda a comprenderla en su decurso histórico, como también nos ayuda hoy a mirar hacia el futuro", indicó el Arzobispo de Toledo y agregó que "desde esta mirada surge espontánea la pregunta: ¿Será cristiana la España del mañana?", lo "será en cuanto se mantenga en sus raíces, en cuanto mantenga viva su memoria y su identidad".
"Pero aún podríamos preguntarnos con mayor radicalidad: ¿Será España si deja de ser cristiana, si renuncia a la memoria de los orígenes que le dieron lugar y existencia, esto es, si renuncia a sus raíces y fundamentos cristianos?", acotó.
Asimismo, el Purpurado recordó que "la cultura dominante del momento trata de relegar la verdad histórica al olvido y fuerza a ignorarla, o superarla por algo totalmente distinto" pero "olvidar esta historia o desfigurarla, erradicar o dejar morir nuestras raíces, sería dejar de ser lo que somos, sería desaparecer, y carecer, por tanto, de futuro".
Tras las palabras del Cardenal Cañizares, el Académico de la RAH, Luis Suárez Fernández, que dirigió unas palabras de contestación, donde afirmó que el Purpurado en su discurso "descubre las raíces mismas de España, una nación a la que Europa debe tantas cosas".