MADRID,
La Confederación Nacional Católica de Padres de Familia y Padres de Alumnos (CONCAPA), lanzó esta semana un enérgico comunicado rechazando el deseo del gobierno de imponer la controvertida materia de Educación para la Ciudadanía (EpC); así como las maniobras de algunos gobiernos autonómicos, como Cataluña y Baleares, que pretenden suprimir la enseñanza de religión en las escuelas.
CONCAPA denunció "la escalada laicista del Gobierno, empeñado en relegar la religión al ámbito exclusivamente privado" y señaló que "en los colegios españoles se obliga a los alumnos a cursar "Educación para la Ciudadanía" pero la Religión no se ofrece dentro del horario escolar, ni siquiera de manera opcional, por lo que deben cursar horas extras.
Esta es "la peor medida que se le puede ocurrir a un Gobierno", señaló CONCAPA.
Para CONCAPA "resulta curioso que una asignatura que solicitan más del 80% de las familias españolas quiera suprimirse mientras otras que nadie las ha solicitado y encima producen un amplio rechazo –como la Educación para la Ciudadanía- sean impuestas en nombre de ‘la democracia’".
Los padres de familia recordaron que en 2005 se recogieron más de tres millones de firmas a favor de la asignatura de Religión, solicitando que fuera opcional, evaluable y computable, con una alternativa de peso, a lo que el Gobierno no sólo hizo caso omiso sino que apostó por la vía contraria.
CONCAPA recordó finalmente que la educación en España no hace sino empeorar, según todos los datos de los informes internacionales.