En una conferencia pública, Matt Foreman, director ejecutivo saliente de la "National Gay and Lesbian Task Force" (NGLTF), una de las organizaciones de presión homosexual más influyentes y agresivas de Estados Unidos, paralizó a sus seguidores y partidarios al confesar que la conducta homosexual es la principal causa de la transmisión del virus del SIDA.
Al hablar sobre el tema del SIDA en su discurso de despedida, ante una audiencia compuesta por miembros y simpatizantes de la NGLTF, Foreman se refirió a las cifras oficiales de las autoridades de salud en Estados Unidos, que han dado la alarma sobre un incremento de la transmisión del SIDA.
"Internamente, cuando se publican estos números, la comunidad homosexual establecida parece encogerse de hombros colectivamente, como si éste no fuera nuestro problema", dijo Foreman.
"Señores: siendo homosexual o bisexual el 70 por ciento de las personas en este país que viven con el VIH, no podemos negar que el VIH es una enfermedad homosexual. Tenemos que aceptar y darle la cara a este hecho", agregó el activista, para el asombro de sus seguidores.
Las declaraciones de Foreman, silenciadas mayoritariamente por la prensa secular, se suman a las que un año atrás realizó Lorri Jean, Directora Ejecutiva del "Centro Homosexual y Lésbico" de Los Angeles (California), también dirigiéndose a un grupo de militantes: "El VIH es una enfermedad homosexual. Acéptenlo. Pónganle punto final".
Diversas organizaciones pro-vida y pro-familia invitaron recientemente a Foreman y otros activistas homosexuales a superar diferencias ideológicas y unirse en una campaña para ayudar a los homosexuales a aceptar lo que las estadísticas de salud evidencian en Estados Unidos: que el SIDA está transmitiéndose mayoritariamente a través de actos homosexuales.