NAIROBI,
La Conferencia Episcopal de Kenia lanzó un dramático llamado por la paz en el país y el cese de la violencia, tras los enfrentamientos que en los últimos días han cobrado la vida de más de 300 personas y han obligado a más de cien mil a abandonar sus hogares, ocurridos tras las elecciones del pasado 27 de diciembre en las que fue reelegido el Presidente Mwai Kibaki.
Ante hechos tan trágicos como la muerte de 50 personas que fueron quemadas vivas dentro de un templo pentecostal, los obispos de Kenia hicieron "¡un apasionado pedido a todos los kenianos, hombres y mujeres, ancianos y jóvenes, de todos los partidos políticos, y de todas las formas de vida, a no originar más violencia y dejar el asesinato sin sentido de nuestros hermanos y hermanas!"
"Hemos vivido juntos todos estos años como hermanos y hermanos. No hay por lo tanto razón para alzarnos contra nuestro prójimo porque él o ella pertenezcan a un grupo étnico distinto o debido a su afiliación política. ¡La vida es sagrada! Todos pertenecemos a la misma familia de Dios", prosiguieron en la carta firmada por el Cardenal John Njue y los demás 23 obispos del Kenia.
Tras precisar que "la raíz de la escalada de violencia han sido los resultados de las recientemente concluidas elecciones generales", los prelados instaron a hacer "todo lo posible para investigar y establecer la verdad de los hechos, por otros medios que no sean la violencia o destrucción de la propiedad", dadas las acusaciones de fraude electoral que la oposición ha formulado contra el oficialismo.
"Debemos defender la justicia, especialmente para los afectados, para aquellos que sienten que sus derechos han sido violados, a quienes se les ha destruido sus propiedades. Abramos canales de justicia y usemos los instrumentos adecuados para hacer que la justicia prevalezca", continuaron.
Seguidamente hicieron un llamado a los líderes políticos: Mwai Kibaki y el líder de la oposición Raila Odinga, a "dialogar para buscar una solución a la situación actual. Este país necesita la paz que está basada en la justicia y la verdadera hermandad".