LA HABANA,
El Arzobispo de La Habana, Cardenal Jaime Ortega y Alamino, dijo que es un "paso prometedor que ha creado expectativas" el pedido hecho el año pasado por el Gobierno, para que todos los sectores de la sociedad se expresen sobre la realidad del país.
Durante la Misa celebrada por la Jornada Mundial de la Paz, el Purpurado recordó que en 2007 las autoridades pidieron "una opinión amplia sobre todos los temas preocupantes". Ello, explicó, hizo que desde todos los niveles de la sociedad se expusieran "un cúmulo de críticas, quejas y propuestas esperanzadoras basadas en la necesidad de cambios, aún estructurales, en la organización y desarrollo de la vida nacional".
En ese sentido, recordó el mensaje de Navidad de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba, en el que se hizo referencia al llamado del Gobierno. Cuando "surgen tantas expectativas acerca de cambios necesarios que puedan mejorar y transformar la vida nacional", señaló el texto, la Iglesia "participa de esta espera y ofrece su oración y su contribución para que se encuentren soluciones reales y eficaces que favorezcan caminos de esperanza".
El mensaje señaló que "en esta tarea todos estamos implicados, sin exclusiones ni marginaciones. Es necesario dar espacios a la iniciativa y creatividad personal, pues todos corremos la misma suerte".
El Cardenal Ortega explicó que los obispos "nos referíamos a las decisiones que debían responder a las inquietudes expresadas y que son esperadas con cierta ansiedad por nuestro pueblo".
"Entre cubanos es posible la tolerancia, la convivencia armoniosa y la reconciliación cuando esta es necesaria", afirmó, e indicó que "no se reconcilian ideas ni posturas que pueden ser irreconciliables, sino personas".