VATICANO,
Al presentar esta mañana en el Vaticano el Mensaje del Papa Benedicto XVI con ocasión de la Jornada Mundial de la Paz 2008, el Presidente del Pontificio Consejo Justicia y Paz, Cardenal Renato Raffaele Martino, ofreció algunas claves para la lectura del documento que lleva por título “Familia humana, comunidad de paz”.
"En todo el mensaje el Santo Padre nos muestra cómo la familia y la paz se unen constantemente en un círculo fecundo que constituye uno de los presupuestos más estimulantes para dar vida a un apropiado enfoque cultural, social y político de las complejas temáticas relativas a la realización de la paz en nuestra época", señaló el Purpurado durante la presentación que tuvo lugar en la Sala de Prensa de la Santa Sede.
En la primera parte del texto, indicó, “se evidencia el sentido y el valor de la conexión entre núcleo familiar y paz, y en la segunda, la familia humana se pone en relación con una serie de problemáticas que atañen a la paz".
La primera parte del mensaje está dedicada a "algunos elementos descriptivos de la visión cristiana de la familia", porque "en la vida familiar se experimentan todos los ingredientes fundamentales de la paz: la justicia en las relaciones entre hermanos y hermanas, la importancia de la ley y la autoridad de los padres, el poder vivido como servicio a los más débiles, la ayuda en las necesidades, la disponibilidad a acoger, renunciar y perdonar".
Según el Cardenal Martino, el Papa “subraya que la familia es titular de derechos específicos" que son "expresión de la ley natural y universal presente en la mente y el corazón de todos los seres humanos" y presenta algunas de sus preocupaciones, "porque la principal agencia de paz, la familia, no puede desempeñar a fondo su propia tarea".
"De hecho –explicó el Purpurado–, actúan contra la paz muchas intervenciones legislativas que debilitan la familia fundada en el matrimonio entre hombre y mujer u obligan a las familias, directa o indirectamente, a no ser disponibles a una acogida de la vida moralmente responsable o que no reconocen el derecho de la familia a ser la primera responsable de la educación de los hijos".