ASUNCIÓN,
La Iglesia en Paraguay inició su preparación para la fiesta de la Virgen de Caacupé, que se realiza el 8 de diciembre, con el tradicional novenario: nueve días de oraciones, celebraciones eucarísticas y peregrinaciones.
El primer día de novenario celebrado el 28 de noviembre, tuvo como tema de reflexión "Somos discípulos y misioneros de Jesucristo" y estuvo dirigido por el Obispo de Concepción, Mons. Zacarías Ortiz Rolón, quien en su homilía lamentó que "muchos paraguayos que mueren de hambre" o "comen una vez al día" y alentó a que "si tenemos la oportunidad de ayudarlos, ayudémoslo".
Por su parte el Obispo San Juan Bautista de las Misiones, Mons. Mario Medina Salinas, quien dirigió el segundo día del novenario que tuvo como tema: "Seguimos a Jesús porque creemos en Él como fuente de vida", destacó en su homilía el rol de los medios de comunicación en la sociedad y afirmó que "la prensa que actúa de contralor frente al poder en aras de informar a nuestro pueblo y exigir el correcto funcionamiento de los poderes del Estado".
La fiesta de la Virgen de Caacupé es la festividad religiosa más grande de Paraguay y se celebra en todo el país cada 8 de diciembre desde 1765. Los festejos principales se desarrollan en la localidad del mismo nombre que es considerada "el centro espiritual y religioso del país".
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