VATICANO,
El Papa Benedicto XVI, que hoy creó a 23 nuevos cardenales, uno de ellos iraquí, Emmanuel III Delly, Patriarca de Babilonia de los Caldeos, pidió un futuro de reconciliación y paz para los hermanos de este país “que padecen en propia carne las consecuencias dramáticas de un conflicto que perdura y viven el presente en una frágil y delicada situación política”.
En su homilía durante los ritos de creación de los nuevos purpurados, el Santo Padre expresó que pensaba “de manera especial” en los cristianos que viven “en zonas difíciles”.
“En estos momentos de alegría pienso en nuestros queridos hermanos de Irak, que padecen en propia carne las consecuencias dramáticas de un conflicto que perdura y viven el presente en una frágil y delicada situación política”, señaló.
Benedicto XVI manifestó que al nombrar cardenal al octogenario Patriarca de la Iglesia Caldea, con sede en Bagdad, ha querido “de manera concreta” expresar su solidaridad y afecto con la población iraquí.
El Obispo de Roma pidió a todos los presentes que imploren a Dios “un futuro de reconciliación y paz para todos los pueblos que viven en esa amada tierra”.
En otro momento del Consistorio, el nuevo cardenal Leonardo Sandri, Prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales, dirigió una palabras al Santo Padre en nombre de los nuevos purpurados en las que dijo que el patriarca iraquí deberá desarrollar "su servicio patriarcal entre lágrimas y sangre" y en el "doloroso éxodo de tantos cristianos de la tierra que tiempo atrás vio partir a Abraham, padre común en la fe y en la esperanza".