CARACAS,
Mediante un enérgico comunicado, la Presidencia de la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV) llamó a todas las partes del debate político, pero especialmente al Gobierno, a poner fin a las agresiones y descalificaciones en el debate sobre la controvertida reforma constitucional que impulsa el Presidente Hugo Chávez.
Los Obispos señalan que ante la propuesta de Reforma Constitucional “Venezuela vive momentos de gran intensidad política, que han llevado a legítimas manifestaciones estudiantiles pero también a actos de violencia verbal y física que perturban la paz”.
Por ello, la Presidencia del a CEV “hace un llamado a todo el pueblo venezolano, y en particular a los Poderes nacionales, y a los dirigentes sociales, políticos y estudiantiles, de cualquier sector o simpatía política, a poner todo el empeño en actuar con serenidad, con espíritu realmente democrático, dentro del marco de la Constitución y las leyes, para mantener la paz y evitar cualquier acto de violencia, que rechazamos venga de donde venga”.
Los Obispos recuerdan que las manifestaciones pacificas, que el gobierno ha venido reprimiendo, “son una legitima expresión de la pluralidad política consagrada en nuestra Carta Magna como uno de los valores superiores del Estado”.
Por ello, exigen no satanizarlas desde el poder “dándoles a priori connotación de ‘conspiración desestabilizadora’”.
La CEV deplora los actos de violencia que se han producido en algunas Universidades, que “deben ser debidamente esclarecidos y sancionados”; pero recuerda que el Estado y el Gobierno “están constitucionalmente obligados a garantizar a todos los venezolanos el disfrute progresivo de los derechos humanos, particularmente el derecho a manifestar pacífica y públicamente su acuerdo o desacuerdo con la propuesta de la Reforma Constitucional sin ser objeto de ataques, descalificaciones u ofensas”.