MADRID,
Bartolomé Blanco Márquez es uno de los más jóvenes miembros del grupo de 498 mártires que el Papa Benedicto XVI beatificará este domingo en el Vaticano. Católico comprometido, este laico de casi 22 años de edad escribió a pocas horas de morir una conmovedora carta a su novia Maruja, que se cuenta como testimonio de su heroico martirio.
"Tu recuerdo me acompañará a la tumba y mientras haya un latido en mi corazón, éste palpitará en cariño hacia ti. Dios ha querido sublimar estos afectos terrenales, ennobleciéndolos cuando los amamos en Él. Por eso, aunque en mis últimos días Dios es mi lumbrera y mi anhelo, no impide que el recuerdo de la persona más querida me acompañe hasta la hora de la muerte", comienza la carta.
Su historia
Bartolomé nació en Pozoblanco el 25 de noviembre de 1914. Huérfano desde niño, fue criado por unos tíos y trabajaba de sillero. Fue asiduo alumno del colegio salesiano de Pozoblanco y ayudó como catequista. A los 18 años de edad fue elegido secretario de la Juventud Masculina de Acción Católica en Pozoblanco.
En esta ciudad fue encarcelado el 18 de agosto de 1936, cuando estaba de permiso durante el servicio militar que prestaba en Cádiz. El 24 de septiembre fue trasladado a la cárcel de Jaén, donde coincidió con quince sacerdotes y otros laicos fervorosos. Ahí fue juzgado, condenado a muerte y fusilado el 2 de octubre de 1936.