BUENOS AIRES,
El 22° Encuentro Nacional de Mujeres celebrado este fin de semana en Córdoba se convirtió -como sus versiones anteriores- en un espacio de ataque contra las mujeres católicas que osaron participar. Ellas fueron agredidas salvajemente por los grupos feministas que han tomado la cita para imponer a la fuerza su agenda abortista y la ideología de género.
"Según testimonios de las mujeres asistentes, la violencia ha marcado las dos jornadas. A las mujeres que son católicas las pretenden expulsar por la fuerza, o donde hay talleres en un subsuelo sin posibilidad de salir las encierran, hay mujeres golpeadas en el hombro, la espalda y los pies", relató el periodista de la agencia NOVA, Emilio Nazar, a quien se le impidió presenciar lo que sucedía en los talleres sobre aborto y anticoncepción.
Los medios locales, indicó, han coincidido en señalar "la presentación anticlerical de las organizadoras, al punto que niegan la condición de mujeres a las católicas, y quieren evitar el ingreso y la palabra de estas mujeres por las buenas… o por las malas".
El periodista dijo que en el evento, en el que las católicas fueron un minoría frente a "miles de mujeres manipuladas en contra", no faltaron las consignas ofensivas contra la fe y contra toda aquella que diese una opinión contraria a la agenda feminista.
"Las mujeres abordan el tema de la discriminación y la violencia de los hombres contra las mujeres, pero jamás el tema de la violencia de mujeres contra mujeres. Y en los mismos talleres se dan los casos", denunció.
"Indefensas (las católicas), sólo les ha quedado una posibilidad: tener el teléfono de la policía preventiva por si pasa algo, para que en tres minutos ingrese a frenar las agresiones. Porque es un encuentro de mujeres, pero esto no significa una ‘zona liberada’ para que haya mujeres cometiendo delitos contra otras. Esto no es ni democrático, ni pluralista ni tolerable", señaló.