BUENOS AIRES,
Más de 800 mil fieles de diferentes partes de Argentina y otros países celebraron los 24 años de la aparición de la Virgen del Rosario en su santuario de la ciudad de San Nicolás de los Arroyos el pasado 25 de septiembre.
Luego de la primera Eucaristía del día celebrada por el Obispo de San Nicolás de los Arroyos, Mons. Héctor Cardelli, a las 00:00 horas, el santuario de la Virgen del Rosario recibió a miles de peregrinos que hicieron una fila de más de 15 cuadras esperando por entrar al templo para orar, venerar y agradecer a la Madre de Dios.
A las 3:00 p.m. en medio de una lluvia de pétalos de rosas salió en procesión la imagen de la Virgen que recorrió las calles de la localidad hasta llegar al "campito", lugar donde el 25 de septiembre de 1983 la Virgen se le apareció a Gladys Quiroga de Motta. Los fieles acompañaron la procesión agitando sus pañuelos y dando vivas a la Madre de Dios.
Luego de la procesión, Mons. Cardelli celebró la Misa donde pidió que "la presencia constante de María, sea el gran signo de nuestros tiempos".
El Prelado señaló que "cuando desoímos a María en obedecer lo que Él nos dice, cuando nuestra voluntad no se ajusta a la de Dios por desconocerla o no aceptarla, la fiesta de nuestra vida se queda sin el mejor vino; ya no celebramos, sino que la desgastamos y despilfarramos en autosuficiencias que nos independizan de Dios, en orgullos y soberbias que lo suplantan a Dios".
Luego recordó que en este último siglo "se han multiplicado las manifestaciones de María" que "vienen a insistir en que volvamos a la Palabra, que hagamos la voluntad de Dios, que nos convirtamos en Jesucristo. La madre misericordiosa acude al recurso de manifestarse para llamarnos a la urgencia de la conversión", acotó.