KÖNIGSTEIN,
Un sacerdote que por motivos de seguridad prefirió permanecer en el anonimato, expresó a la asociación Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN), su temor de que el Gobierno de Hugo Chávez comience a confiscar escuelas católicas y centros de salud administrados por la Iglesia, como mecanismo para amedrentar e imponer su proyecto ideológico a la población.
Durante su visita a la asociación de ayuda internacional, el sacerdote manifestó su deseo de estarse equivocando en su percepción sobre la política sanitaria y educativa del Estado; sin embargo, alertó que este usa un “tono cada vez más violento” para atacar públicamente a la Iglesia en la persona de obispos y sacerdotes. “Espero y rezo por equivocarme”, expresó.
En ese sentido, añadió que el Estado está presionando a las escuelas para que usen el material aprobado por él, con el fin de adoctrinar a la población.
En su diálogo con AIN, el presbítero afirmó que los programas sociales del Gobierno venezolano no tendrán efecto a largo plazo porque “sólo sirven para satisfacer las necesidades más inmediatas” y ganar adeptos al régimen.
Asimismo, tras advertir que la sociedad venezolana nunca había estado tan dividida, el sacerdote afirmó que a la Iglesia y al país le esperan momentos muy difíciles.
“Los sacerdotes y obispos debemos ser cautos a la hora de denunciar estas situaciones, pero tampoco debemos serlo demasiado, porque nuestro servicio a la verdad podría perder su misión profética”, señaló.
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