CARACAS,
El Presidente Hugo Chávez continuó sus frecuentes ataques a los obispos del país y dijo esta vez que “la jerarquía católica venezolana es una de las más furibundas defensoras del pasado, de la injusticia, de la inmoralidad y de los poderosos, y arremete contra la verdad con toda desfachatez y sin vergüenza”.
En el programa proselitista ¡Aló Presidente!, Chávez respondió algunas preguntas de la escritora mexicana Elena Poniatowska. En la entrevista afirmó creer en Cristo, en su “pensamiento social” y que, “como dice Fidel (Castro), que con códigos cristianos puede elaborarse, como aquí lo estamos haciendo, la base para un proyecto socialista”.
Seguidamente, Chávez “denunció” que “la Iglesia es otra cosa. La Iglesia se convirtió en otra cosa sobre todo después de la etapa de los primeros cristianos. Solo hay que recordar cómo la Iglesia Católica, Apostólica y Romana bendijo el genocidio en América Latina y África. Esa no puede ser la Iglesia de Cristo”.
Para Chávez, en “Argentina, Uruguay y otros países, (la Iglesia) apoyó las más horrendas dictaduras, con escuadrones de la muerte y miles de desaparecidos”.
Asimismo, el mandatario, quien día tras día arremete contra los obispos en el país, señaló que en Venezuela “la jerarquía apoyó el golpe de Estado de 2002, a pesar de que no ha habido en los últimos 100 años un gobierno más cercano a la opción de los pobres que éste”.
En abril de 2002, explicó hace unos días el Arzobispo de Mérida, Mons. Baltazar Porras, “lo único que hicimos fue acudir a un llamado del propio Presidente para cumplir con un deber sacerdotal y humanitario que era el resguardo de su vida y de quienes estaban junto a él y ahora quiere hacer aparecer a la Iglesia como parte del complot en contra de él”.