MADRID,
El Presidente de la plataforma ciudadana Hazteoir.org, Ignacio Arsuaga, exigió al Partido Socialista Obrero Español (PSOE) que respete el derecho de los padres a la objeción de conciencia ante la asignatura Educación para la Ciudadanía (EpC) en vez de amenazar con cerrar los colegios concertados porque "no es la Iglesia la que está objetando", sino "miles de padres" en todo el país.
Arsuaga respondió de esta manera a las amenazas que el miércoles lanzó el eurodiputado socialista Miguel Ángel Martínez, quien expresó "la conveniencia de replantearse el seguir financiando los colegios concertados", aquellos financiados con dinero público y que son administrados por la Iglesia; porque según él, es ella la que está llamando abiertamente a objetar esta asignatura.
"Queremos recordar al PSOE que no es la Iglesia la que está objetando, como tampoco hay un solo centro que se haya negado a impartir la materia, sino que son miles de padres en toda España los que recurren a la objeción –como no podría ser de otra manera, ya que el derecho a la objeción solo ampara a los individuos– que sienten amenazados su derecho fundamental a educar a sus hijos según sus convicciones", señaló.
Indicó que este derecho se ve "amenazado por una asignatura de fuerte contenido ideológico" y que "se impone como evaluable sin contemplar siquiera una materia alternativa".
El Presidente de Hazteoir señaló que esto se comprueba fácilmente en los libros de texto que serán utilizados o en las lecturas promovidas por el Ministerio de Educación y Ciencia –como "Alí Babá y los 40 maricones"– y que tienen un amplio contenido ideológico al inculcar el relativismo, la ideología de género, la ausencia del sentido trascendental del hombre, entre otros; que se quieren imponer desde el Estado bajo una falsa formación de ciudadanos.
Finalmente, ante la afirmación del eurodiputado socialista de que el rechazo a EpC "está en contradicción con el espíritu y las normas de la UE", Arsuaga recordó que el derecho a educar es de los padres y no del Estado; avalado por la Constitución española, las leyes internacionales y el "espíritu europeo" al que apela Miguel Ángel Martínez.