MADRID,
Mons. Francisco Cerro Chaves, designado este jueves por el Papa Benedicto XVI como nuevo Obispo de la Diócesis de Coria-Cáceres, señaló durante sus primeras declaraciones a la prensa que espera contribuir a la construcción de una Iglesia más valiente, libre y joven.
El Prelado, que hasta su nombramiento se desempeñaba como Director del Centro diocesano de espiritualidad de Valladolid y como delegado diocesano de Pastoral juvenil, señaló que espera centrar su trabajo episcopal en "llevar a la gente a un profundo conocimiento de Cristo, en la comunión episcopal y en estar cerca a los pobres, que son mis predilectos".
"En mi alma -confesó el nuevo Obispo- conviven dos sentimientos contrapuestos: una mezcla de alegría y de prudencia humana por la responsabilidad que me acaba de confiar su Santidad Benedicto XVI".
Mons. Cerro, de 49 años, expresó también que "con humilde abandono en las manos de la Providencia de Dios, deseo trabajar por un mundo más justo y solidario, donde se proteja a la familia, se garantice el derecho de los padres a la educación de los hijos, se respete la creación y seamos todos constructores de paz, constantemente amenazada".
"Soy uno de los obispos más jóvenes de España", explicó el Prelado, pero inmediatamente recordó jocosamente las palabras del Papa Juan Pablo II cuando fue nombrado Obispo a los 39 años: "la juventud es lo que más pronto se pasa".
"Espero poder contribuir con humildad a la construcción de una Iglesia más valiente, más libre y más joven", concluyó Mons. Cerro.