MADRID,
España está inmersa en un “invierno demográfico” sin precedentes y las proyecciones futuras reflejan un envejecimiento poblacional aún más acelerado no compensado por la ínfima natalidad española, señaló el Instituto de Política Familiar (IPF) que anuncia que para el 2050 este país será “la nación europea con la peor relación jubilados-población activa”.
Según el instituto familiar, a mitad del presente siglo, en España, "por cada tres personas en activo, dos estarán jubiladas". De este manera, agrega, el país superará al resto de los países europeos donde por cada dos personas en activo habrá una jubilada.
El presidente del IPF, Eduardo Hertfelder, explica que los indicadores actuales indican “serios problemas estructurales”: mientras que la cantidad de personas mayores de 65 años alcanza los 7,3 millones, los jóvenes menores de 14 años son solo 6,2 millones, es decir, existe una diferencia de un millón 100 mil personas.
Para Hertfelder esto es “consecuencia de una situación social donde la familia no es protegida ni apoyada, más allá de algunas escasas y limitadas medidas, en su mayoría de carácter asistencialista”. Para el presidente del IPF “existe una relación directa entre la casi inexistente ayuda a la familia y a la natalidad por parte de las administraciones y el envejecimiento poblacional existente”.
Para el prestigioso instituto “si esto es ya de por sí preocupante, lo es más las proyecciones futuras” puesto que “los pocos nacimientos que se producen no compensan el aumento continuo e intenso de los mayores, especialmente de las edades avanzadas”.
“Mientras España es la nación europea con mayor incremento porcentual de sus mayores –en los últimos 23 años la población mayor de 65 años ha aumentado en más de tres millones de personas, lo que representa un incremento del 72 por ciento–, se encuentra a la cola en cuanto a tasa de fertilidad (1,35 hijos por mujer) y su consiguiente pérdida de juventud”, indica el IPF.