LIMA,
Bajo el lema “Familia Unida, camino para la Paz” se realizó el último sábado en el distrito limeño de San Juan de Miraflores, el lanzamiento de la Campaña Nacional de Solidaridad “Compartir” 2007, que este año abordará el tema de la violencia familiar.
En el acto presidido por Mons. Juan José Larrañeta, Secretario General de la Conferencia Episcopal Peruana y Presidente de la Campaña, estuvieron presentes también Mons. Carlos García, Obispo de Lurín y Sara Vega, representante de la Dirección General de la Familia y Comunidad del Ministerio de la Mujer y Desarrollo Social.
En la inauguración, Mons. Larrañeta recordó que los obispos peruanos, reunidos en Asamblea Plenaria a principios de año, eligieron el tema de la violencia familiar porque es una realidad que azota a miles de familias en nuestro país.
Agregó que en el Perú se dan dos tipos de violencia: la violencia física entre esposos, de padres a hijos y contra los ancianos; y la violencia psicológica o moral, que es la que más afecta a las personas, y que en muchos casos optan por el suicidio.
El Episcopado peruano dedica todos los años la Campaña de Solidaridad “Compartir” a los más desprovistos del país, es decir, a los niños, mujeres, hombres, ancianos y jóvenes que no cuentan con los recursos suficientes para su desarrollo integral.
Según una encuesta demográfica y de salud familiar publicada en el 2006, el 79 por ciento de las mujeres que han sufrido violencia no denuncian el hecho. Asimismo, el 49 por ciento de los niños y adolescentes reciben golpizas y maltratos de parte de sus padres y en el caso de los adultos mayores, los Centros de Emergencia del Ministerio de la Mujer atendieron mil 120 denuncia de maltratos.