Miles de fieles del Estado mexicano de Jalisco, especialmente en Guadalajara, recordaron este jueves el 14º aniversario del brutal asesinato, aún no esclarecido, del Arzobispo de Guadalajara, el Cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo, develando una placa en su honor y solicitando justicia.
El jueves por la mañana, se develó en un acto público masivo una placa conmemorativa en la zona llamada “Jardín de la Verdad”, mientras que por la tarde se celebró una Solemne Misa en la Catedral de Guadalajara que no pudo ser presidida por su Sucesor, el Cardenal Juan Sandoval Iñiguez, quien se encuentra participando de la V Conferencia General del Episcopado en Aparecida
El Lic. José Antonio Ortega Sánchez, abogado del Arzobispado tapatío, insistió en que el caso del asesinato del Purpurado, que apunta a fuerzas ocultas del gobierno de entonces, sigue abierto; e insistió en que la versión oficial esgrimida por la Procuraduría General de la República de que su asesinato fue una “confusión” producto de un fuego cruzado entre bandas narcotraficantes rivales en el aeropuerto de Guadalajara, “es simplemente infantil e inaceptable”.
Ortega Sánchez insistió en que hay “indicios, pruebas y testimonios en el expediente” que aún se pueden examinar y profundizar; y que merecen especial atención los claros indicios de que el recordado Cardenal tenía conocimiento sobre la relación entre algunos políticos de entonces y el narcotráfico.
El Cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo fue asesinado salvajemente el 24 de mayo de 1993 en el aeropuerto de Guadalajara, lugar donde actualmente existe un busto en su honor.
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