MADRID,
España, donde en el 2006 se produjeron 141 mil 817 divorcios, es decir, uno cada 3,7 minutos, se ha convertido en el país de la Unión Europea de los 15 (UE15) con mayor tasa de divorcios por habitante, informó el Instituto de Política Familiar (IPF) según datos del Consejo General del Poder Judicial español.
El IPF señaló asimismo que el número de divorcios se incrementó en el 2006 en un 51 por ciento respecto al año anterior y en un 277 por ciento respecto al período 2001-2006.
Según informa el Instituto que dirige Eduardo Hertfelder, Canarias, Baleares y Cataluña son las Comunidades Autónomas con mayor tasa de divorcios y Castilla-La Mancha es la región donde han crecido más desde el 2004 habiéndose más que triplicado (más del 228 por ciento).
Para Hertfelder “estos datos deben interpelar a la sociedad española y a las administraciones públicas, que deben replantearse la situación y tomar medidas urgentes que detengan este auténtico suicidio social. Es necesario un auténtico cambio de rumbo en cuanto a medidas legales, protección social y cultural del matrimonio y la familia para lograr enderezar esta tremenda crisis que estamos viviendo en España”.
Al momento de sacar conclusiones, el IPF sostiene que “los datos son irrefutables y denotan el fracaso de un Gobierno que implementa leyes –como la del divorcio-express– que provoca un aumento de la ruptura familiar en España”.
“Y si además, al día de hoy, el Gobierno todavía no ha elaborado una ley de Prevención y Mediación familiar –ni lo tiene prevista siquiera– denota la escasa sensibilidad del Ejecutivo hacia la problemática de la familia”, sentencia el IPF antes de pedir “una rectificación urgente de la Ley del ‘divorcio-express’” y la implementación de “medidas de apoyo a la familia”.