APARECIDA,
Habilitados para poder "asesorar" a los obispos que participan en la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe que se realiza en Aparecida, la treintena de teólogos, sociólogos y políticos que conforman el grupo de presión "Amerindia" distribuyeron este viernes el primer material entre los obispos.
"Amerindia", cuyo centro de operaciones se encuentra en la Casa San Canisio en Aparecida, distribuyeron hoy en los casilleros asignados a los participantes, dos folletos; uno titulado “¿Qué es la Verdad?” del anciano teólogo belga Joseph Comblin, y otro folleto con un conjunto de textos, proclamas y reivindicaciones publicado por la organización “Somos Iglesia” de Chile, cuyos miembros se encuentran activos en la Sala de Prensa en Aparecida.
El folleto de Comblin, de 63 páginas, es básicamente un retorno a las antiguas tesis liberacionistas del teólogo y una explicación de la realidad desde una perspectiva ideológica según la cual la pérdida masiva de fieles en el Brasil en favor de sectas y otras denominaciones es consecuencia de que no existen suficientes “comunidades eclesiales de base” (CEBs) y no lo contrario, como lo han demostrado diversos estudios pastorales y sociológicos realizados no sólo en el Brasil, sino en el resto de América Latina.
El folleto concluye con una dura crítica a la teología de la Iglesia, a la que califica de "occidental", y señala que “esta teología no llevó a la Iglesia al conocimiento de Jesús... el camino de la teología occidental sirvió para exasperar divisiones, para fabricar herejías y expulsar de la Iglesia a las personas que trataban de hacerla presente en un mundo de cambios constantes".
"El Concilio Vaticano II -sigue el teólogo belga- demostró hasta qué punto la teología está lejos de la realidad. Ofrecieron una buena teología ¿Y qué fue lo que sucedió? ¡Nada! Toda esta teología quedó paralizada”. “Cuarenta años después (del Concilio)”, concluye Comblin, “la iglesia continúa inmutable, paralizada y poco capaz de evangelizar”.
El segundo folleto, de “Somos Iglesia” Chile –un remedo sudamericano de la organización con el mismo nombre fundada en Austria una década atrás-, incluye un conjunto no orgánico de textos, discursos y proclamas abiertamente políticas e ideológicas.