VATICANO,
Este mediodía el Papa Benedicto XVI recibió a los Nuncios en América Latina al concluir la reunión de preparación para la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano recordando que la verdadera identidad de los países latinoamericanos ha sido creada por el encuentro de sus culturas y la fe cristiana y alentando a profundizar en ella.
“El encuentro entre estas culturas y la fe en Cristo fue una respuesta interiormente esperada por tales culturas (…), encuentro que debe ser profundizado y que ha creado la verdadera identidad de los pueblos de América Latina”, dijo el Santo Padre haciendo referencia a la situación de la fe en el Continente de la Esperanza.
Refiriéndose a la próxima Conferencia General del Episcopado a realizarse el próximo mes de mayo en la ciudad de Aparecida (Brasil), el Pontífice recordó que ésta buscará “definir las grandes prioridades y suscitar un renovado ardor por la misión de la Iglesia al servicio de los pueblos latinoamericanos en las circunstancias concretas del inicio de este siglo XXI”.
Sobre la relación entre la Iglesia y los diferentes estados de América Latina, agregó que “la Iglesia, signo e instrumento de unidad para todo el género humano, está naturalmente en sintonía con la legítima aspiración de los pueblos para una mayor armonía y cooperación, dando el aporte que le es propio, el Evangelio”.
“La Iglesia Católica es la institución que goza de mayor crédito para las poblaciones latinoamericanas –agregó el Papa–. Es activa en la vida de la gente, estimada por los trabajos que realiza en los diversos ámbitos de la educación, de la salud y de la solidaridad con los más pobres”.
Más adelante afirmó que el desafío de la Iglesia es el de “reafirmar su adhesión a Cristo para dar testimonio de una fe madura y llena de alegría. Verdaderamente enormes son las potencialidades espirituales a las que puede recurrir América Latina, donde los misterios de la fe son celebrados con férvorosa devoción y la confianza en el futuro es alimentada por el aumento de las vocaciones sacerdotales y religiosas”.