LONDRES,
El Arzobispo de Westminster, Cardenal Cormac Murphy O’Connor, destacó que "lo mejor para un niño es estar bajo el cuidado de un padre y una madre", tras la negativa del gobierno británico de eximir a las agencias de adopción católicas de una ley que las obliga a dar niños a parejas homosexuales, medida ante la cual se prepara una campaña en defensa del rol de la Iglesia en la vida pública.
Así lo indicó el también Primado de la Iglesia en Inglaterra y Gales en su columna publicada hoy en The Daily Telegraph, en donde también se explica que los obispos instarán a los fieles a presionar a los diputados que los representan para que organicen una firme protesta en el Parlamento cuando se debata la ley, el mes próximo.
El Purpurado dijo asimismo que una cosa es querer que los homosexuales adopten y otra cosa muy distinta es "imponer" esta regla porque es "ir demasiado lejos". Según el Cardenal se crea así una nueva "normalidad" y "cualquier organización que no esté dispuesta a aceptarla" se queda "sin papel que desempeñar en ese servicio público".
"La convicción más profunda de las religiones cristiana, judía, musulmana y sij es la de que lo mejor para un niño es estar bajo el cuidado de un padre y una madre', señala el Cardenal, según el cual los líderes de esas religiones han abogado por un "espacio en el que se pueda respetar esa convicción en el sector público", subrayó.
"Los servicios públicos, en nuestra tradición, se benefician enormemente de un voluntariado muchas veces inseparable de la motivación y la conciencia religiosas", agregó el Purpurado.
En declaraciones a la BBC, el Primado inglés dijo que la ley que entrará en vigor en abril, crea "un nuevo tipo de moralidad" y advirtió de que la decisión del Gobierno de no eximir de su cumplimiento a las agencias católicas constituye un paso más para expulsar a la religión de la vida pública.