LIMA,
La controversia en torno a la complicidad del diario New York Times (NYT) en la promoción de la legalización del aborto en América Latina ha venido creciendo en los últimos días luego que diversos medios en Estados Unidos, Canadá y América Latina recogieran el reconocimiento del editor de lectores del diario que uno de sus más extensos artículos se basó en información falsa y manipulada.
La controversia comenzó el 9 de abril de 2006, cuando el periodista Jack Hitt, un colaborador del NYT que escribe sistemáticamente a favor del aborto, publicó un extenso artículo basado en el reportaje a dos mujeres, una de las cuales era Karina del Carmen Herrera Clímaco, una salvadoreña supuestamente condenada a 30 años de cárcel por abortar; y a quien Hitt ponía como ejemplo de la “inhumanidad” de las leyes contra el aborto del América Latina.
En el extenso artículo, que aún sigue siendo utilizado como propaganda por organizaciones abortistas latinoamericanas como “Mujer y Salud en Uruguay” (MISU), Hitt afirmaba que “el problema no era solo que en este país tan católico una tímida mujer de 24 años de edad (Herrera Clímaco) pudiera sentirse avergonzada de contarle su historia a un hombre mayor. Estaba también el estigma criminal”.
En el artículo, Hitt mostraba su clara posición a favor del aborto y ponía como víctima y heroína a Karina del Carmen Herrera Clímaco, de quien afirmaba que, “como toda persona que está en prisión, ha inhabilitado los detalles de su historia al punto de que ya no suenan verdades ni mentiras. La ha comprimido en un denso y sencillo cuento de inocencia”.
Seguidamente, el autor indicaba que el asunto al final “era algo así: Ella (Herrera Clímaco) había abortado a las 18 semanas, para nada diferente a un aborto en (Washington) D.C., algo totalmente legal en Estados Unidos. Sólo que abortó en El Salvador”.