VATICANO,
El Arzobispo Giovanni Lajolo, Presidente de la Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano, presidió esta fría tarde romana la ceremonia oficial de iluminación del árbol de Navidad, que se colocó el miércoles pasado en la Plaza de San Pedro.
En el acto participaron autoridades religiosas y civiles de Calabria, la región italiana que ha regalado este año el abeto, procedente de los bosques del Parque Nacional de Sila. El árbol mide más de 30 metros y pesa 7 toneladas.
El Árbol se eleva junto al imponente Nacimiento actualmente en construcción, que será inaugurado la tarde del 24 de diciembre, y que consta de diecisiete figuras de tamaño natural. Nueve de ellas corresponden a las originales prestadas por San Vincenzo Pallotti para el pesebre de la Iglesia de Sant' Andrea della Valle en 1842 y las ocho restantes se han ido añadiendo a lo largo de los años.
Además, la provincia de Trento y el ayuntamiento del pueblo trentino de Tesero, han aportado este año al Nacimiento de San Pedro trece personajes esculpidos en madera y animales, así como objetos de uso doméstico para la representación de la vida cotidiana.
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